Volví a caer en el mismo pozo.
Me lo he preguntado muchas veces:
“¿Cómo es que termino otra vez en el mismo lugar de dolor?”
¿Qué no vi esta vez? ¿Qué parte de mí lo permitió?
Nada de lo que hoy duele ha ocurrido por azar. Aunque no lo hayas visto venir, este presente fue moldeado por decisiones pasadas, por heridas abiertas o señales ignoradas.
Pero no estás atrapada.
Como decía mi abuela:
“Todo se puede resolver, menos la muerte.”
Mientras haya vida, hay oportunidad.
Y esta vez puede ser diferente.
¿Qué hago cuando siento que ya no tengo energía?
Cuando tropiezas con la misma piedra, cuando el dolor se repite, es normal sentirse vacía, sin fuerzas.
Los golpes del destino desgastan.
Y antes de tomar decisiones, necesitas recuperar tu energía vital.
¿Y cómo hacerlo si ni siquiera sabes qué te la quita?
¡Pídelo!
Con el corazón en la mano: “Universo, muéstrame por dónde se me va la energía.”
Como enseñaba el Maestro Jesús:
“Pide y se te dará.”
🔑 Técnica recomendada: Declarar Amnistía
Cuando no sabes por qué se repite el mismo ciclo, esta técnica puede ayudarte.
Declarar Amnistía permite que lo invisible se revele. A veces lo muestra un sueño, una conversación inesperada o una intuición que resurge.
Es una herramienta que actúa sin forzar.
¿Y si ya sé qué pasó?
Si sabes lo que te ha herido —una decepción, una pérdida, una traición—, el siguiente paso es sanar, no quedarte a vivir en el pozo.
Aquí tienes recursos que pueden ayudarte:
¿Cómo evitar volver a caer en el mismo pozo?
La clave está en ver con claridad antes de actuar y en reconstruirte antes de volver a decidir.
Cuando recuperas tu energía, tu intuición se afina. Ya no repites lo mismo porque estás presente.
Este camino no es castigo.
Es una llamada a despertar.
Y aunque volviste a caer en el mismo pozo, esta vez hay algo distinto en ti:
el deseo verdadero de no repetirlo más.
Y eso, querido amigo del alma, ya es otra historia.
Un abrazo de luz
Brinda Mair
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